martes, 11 de marzo de 2014

Deberes (2)

Continúo esta semana con algunos consejos que pueden ser de utilidad para vosotros y vuestros hijos acerca de los deberes.

  • Cuidado al corregir... No podemos estar todo el día borrando los ejercicios que hacen mal, aunque sí tenemos que decirles lo que no está bien. Os propongo un ejemplo aunque seguro que vosotros tenéis otros mejores: «Creo que esta suma no está bien, a mí me da otro resultado ¿la hacemos de nuevo?» Normalmente se darán cuenta del error y lo corregirán. De esta manera serán ellos los que borren y no nosotros. En este aspecto tenemos que tener especial cuidado, tanto en lo que decimos como el tono con que lo decimos porque podemos dañar su autoestima.
  • … pero hay que exigir: Lo dicho anteriormente no implica que no les exijamos y que se esfuercen. Nosotros como padres sabemos cuál es el límite de nuestros hijos y todo aprendizaje requiere un esfuerzo.
  • Espacio: Desde que son pequeños mandamos a nuestros hijos a su habitación a estudiar. Yo no soy muy favorable con esta medida en estos primeros años de Educación Primaria, aunque quizá si para el último ciclo. Voy a  intentar explicados la razón: Ellos no están acostumbrados a estar solos delante de un libro o un cuaderno, porque en el colegio trabajan todo el tiempo con sus compañeros y profesores; lo que ocurrirá probablemente es que se queden mirando a las musarañas, al poco llegaremos nosotros y nos enfadaremos porque no han hecho nada en ese rato que han estado. «¡Pobres!» La alternativa tampoco es quedarnos sentaditos a su lado mirando cómo trabajan «¡Qué aburrido!» ¿Qué propongo entonces?: Buscar un lugar común que sea tranquilo, donde por supuesto no esté la televisión encendida, y donde nosotros compartamos ese espacio con ellos realizando otra actividad (se me ocurren multitud de ellas). De este modo vemos si están centrados en sus deberes y, si no es así, podemos recordarles que tienen que estar trabajando. Si tienen dificultad estaremos cerca para ayudarles y, además, también verán que nosotros tenemos tareas que realizar.

A medida que vayan madurando, podemos ir dejándoles más tiempo solos. La concentración es algo que requiere práctica. De golpe y por pasar de curso nuestros hijos no van a saber realizar los deberes solos y, además, bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario